La generación de energía fotovoltaica distribuida utiliza componentes fotovoltaicos para convertir directamente la energía solar en energía eléctrica en un sistema de generación de energía distribuida.
La capacidad de la central eléctrica suele oscilar entre 3 y 10 kW.
Se conecta a la red pública o red de usuario a un nivel de tensión de 220V.
Aplicaciones
Utilizar centrales fotovoltaicas construidas en tejados residenciales, comunidades de villas y pequeños estacionamientos en comunidades.
Autoconsumo con excedente de electricidad inyectado a la red.